Un texto que cuestiona el por qué las mujeres son juzgadas por la historia de forma diferente a los hombres.
Clitemnestra una mujer considerada por la historia como la más perversas porque ejecuta a su marido. Ella que se tuvo que casar con el hombre que mató a su primer marido y su primogénito, para quedarse con su reino; y luego sacrifico a una de sus hijas… ¡para que soplara el viento! La historia olvidó estos hechos y convirtió a Clitemnestra en una asesina sin causa, la peor de las mujeres. ¡La mujer temida! Muy posiblemente por ir en contra del patriarcado. Sus crímenes serían comprendidos si fuese un hombre, pero no están permitidos en una mujer.
Un texto que confronta a la mujer con la maternidad. Una madre sobre las madres rechaza la maternidad. Una mujer que asesina a su marido para vengar la muerte de sus hijos es muerta por sus propios hijos para vengar la muerte de su padre. Una cadena de venganzas absurdas.
La función que levantan Natalia Moya y Luis Quinteros nos sitúa en una calle cualquiera de una gran ciudad de frontera, en el reino de los sin techo, de los sin lugar. Donde la maternidad puede ser la esperanza, para olvidar la miseria y el sufrimiento. Pero que para Clitemnestra no es más que una forma de perpetuar la rueda del patriarcado. Situada en la época actual, pone de relieve como la mujer sigue siendo violada y degradada, maltratada y denigrada y el sistema continua teniendo el control para crear opinión y hacer a estas mujeres trasparentes.
Natalia hace una interpretación sentida, con una trabajo magnífico con los objetos y el espacio. Para los pocos medios con los cuenta, las soluciones nos sorprenden y transportan. Habla de la mujer migrante, el último de los marginados, sobre las que se ejerce la violencia más extrema y cruel. Violación, maltrato, desprecio y por último la historia se encarga de hacer desaparecer todos los ultrajes y convertirla en el más perverso de los seres. ¡Y no es una cosa del pasado!
Todos salimos de un vientre de mujer, no se puede olvidar eso, como dicen en la representación.
Está función es una reivindicación y un grito por todas las mujeres, por su fuerza, y por su poder de decisión.